01

Mar

2022

Como “niñólogo” aficionado, al haber vivido las inundaciones del 72 y los niños del 83 y el 98, sabía desde cuando estaba en el colegio que El Niño: las lluvias alrededor de Navidad causadas por El Niño Dios.

Por Ernesto Gallo. 01 marzo, 2022. Publicado en El Tiempo, el 26 de febrero de 2022.

Un cliente me preguntaba si habrá sequía, los expertos dicen que estamos en situación de “Niña”, aguas frías y escasas probabilidades de lluvias, salvo algún trasvase de la selva.

Como “niñólogo” aficionado, al haber vivido las inundaciones del 72 y los niños del 83 y el 98, sabía desde cuando estaba en el colegio que El Niño: las lluvias alrededor de Navidad causadas por El Niño Dios, según los piuranos que bautizaron al fenómeno, eran aguas calientes que bajaban de Ecuador. El científico Ramón Mugica, profesor de la UDEP, explicó que El Niño del 83 estaba por terminar debido a que el mar ya no estaba caliente, y se supo que el agua venía de Asia.

El Niño del 98 se pudo pronosticar desde el 97, una inmensa masa de agua caliente llegaría a las costas de Sudamérica. Se tomaron precauciones para minimizar el impacto, que fue muy grande; se especula que, antiguamente, El Niño había hecho desaparecer florecientes civilizaciones prehispánicas en la costa norte.

En mis apócrifas actividades de “niñología”, mientras trabajaba en una universidad americana en Centroamérica, noté (en setiembre del 2015) una inmensa masa de agua caliente que los medios llamaban el Niño Godzila, la foto del fenómeno era dantesca, sería peor que el 98; retornaba al Perú por temas de agronegocios el 2016, dijeron que sería un mal año; pero, llegó el 2016 y prácticamente no pasó nada.

Para enero del 2017, se analizaba en Piura a qué cultivos cortarles el agua que era escasa y se preveía una prolongación de la sequía. Súbitamente, a fines de enero, emergió un Niño imprevisto, inexplicable con los modelos y data disponibles, se le llamó “costero”, por ponerle algún nombre.
Dada la proyección del Godzilla Niño y dado que no pasó nada el 2016, mi teoría era que El Niño del 17 era la “Cola del Godzilla”, la termodinámica diría que la masa de agua caliente en el sistema cerrado del Pacífico no desapareció. Y, por el movimiento de Coriolis, subió a la superficie de la costa peruana a fines de enero generando fuertes lluvias y una inundación en la ciudad de Piura no vista desde el 72. Ese año, cubrió el sur de la ciudad; un dique en el parque Cáceres, antes la avenida Grau, evitó que el agua siguiera un brazo antiguo por el Club Grau, mercado modelo, Santa Isabel y El Chipe. Los del sur vivimos inundados por un buen tiempo.

Los expertos consultados me indican que, dado que no hay un Godzilla subyacente, como el 2017 (es decir ya aceptan la teoría) y que el mar está frío se debe esperar una sequía este verano del 22.

Este es un artículo de opinión. Las ideas y opiniones expresadas aquí son de responsabilidad del autor.

Comparte: